Casa Real confirmó que este domingo la Princesa Leonor y la Infanta Sofía estarían presentes en la final de la Eurocopa femenina.
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Este domingo 27 de julio, el estadio St. Jakob-Park de Basilea, en Suiza, se engalana para recibir a las selecciones de Inglaterra y España, quienes se disputan la gran final de la Eurocopa 2025 femenina. Tras una semifinal muy reñida en la que la Selección de Alemania no se lo puso nada fácil, Aitana Bonmatí marcó en los últimos minutos de partido, logrando colar a España en la gran final. Un día después, Casa Real confirmó la presencia de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía este domingo en Basilea. Hablamos con María José Gómez y Verdú, experta en protocolo, sobre lo que ello implica y cómo debe de ser el comportamiento de ambas en este evento deportivo.
Tal y como señala la experta en protocolo y etiqueta, “la representación oficial de la Familia Real en actos públicos responde a un criterio estratégico, acordado entre la Casa del Rey y el Gobierno. Si bien el Rey Felipe VI y la Reina Letizia son tradicionalmente quienes ostentan el mayor peso institucional, en los últimos años se ha incrementado la visibilidad de sus hijas en ciertos actos, especialmente aquellos de carácter simbólico, educativo o cultural”.
La Princesa Leonor y la Infanta Sofía, en un partido de la Selección española femenina.
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No es la primera vez que las hijas de los Reyes acuden juntas a un partido de fútbol femenino para apoyar a la Selección española
Según María José Gómez y Verdú, “la decisión de enviar a Leonor y Sofía, sin la presencia de sus padres, puede leerse como un gesto de respaldo institucional hacia el deporte femenino, al mismo tiempo que permite proyectar una imagen de modernidad, cercanía y relevo generacional”. Por ejemplo, “en el caso concreto de Leonor, como heredera al trono, este tipo de actos forman parte de su progresiva formación como figura de Estado”. Mientras tanto, “para Sofía, aunque no tiene funciones oficiales asignadas, su presencia refuerza la imagen de unidad familiar y compromiso con causas sociales o deportivas relevantes”.
Apunta que “no es la primera vez que las jóvenes asisten solas a un evento deportivo, pero sí es la primera ocasión en que lo hacen en el marco de una final internacional con alto perfil mediático”. Y añade: “Existe un antecedente: el 16 de julio de 2022, ambas acudieron al partido entre España y Dinamarca en la Eurocopa femenina celebrada en Londres. Aquel fue su primer acto deportivo en el extranjero sin los Reyes, en lo que fue leído como una prueba discreta de visibilidad institucional. Sin embargo, la dimensión y simbolismo de una final como la de este 2025 convierte esta nueva aparición en un gesto de mayor calado”.
La Princesa Leonor y la Infanta Sofía, con las jugadoras de la Selección Española de fútbol.
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La Princesa Leonor y la Infanta Sofía asistirán este domingo a la final de la Eurocopa femenina
Le preguntamos si es habitual que la Infanta, sin agenda institucional todavía, represente a España en una final de estas características: “No es común, pero tampoco insólito. La Infanta Sofía, al igual que lo fue su tía la Infanta Elena en su momento, puede acompañar a miembros de la familia en actos públicos de especial relevancia. En este caso, su presencia junto a la heredera al trono da un carácter simbólico al evento, sin implicar un papel institucional directo. Sofía actúa como acompañante, no como representante oficial, pero el hecho de estar presente contribuye a la proyección pública de la institución monárquica entre los jóvenes y en entornos donde la presencia femenina merece ser visibilizada”, explica.
María José Gómez y Verdú apunta que “el matiz fundamental radica en su papel constitucional. Leonor, como Princesa de Asturias, representa a la Corona, aunque aún no tenga funciones ejecutivas. Su presencia tiene un peso protocolario claro y responde a una lógica de formación institucional. Su figura está sujeta a un escrutinio mayor, su comportamiento, lenguaje corporal y vestimenta están más rigurosamente observados”.
También nos habla de cómo debe de ser el comportamiento de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía cuando se encuentren viendo el partido y en el posterior saludo a las jugadoras de fútbol: “Se espera que, en el palco, mantengan compostura, celebren con mesura y eviten excesos de entusiasmo. El palco es una extensión simbólica de la institución, no un espacio de expresión personal. La neutralidad y el respeto son claves”. Y añade: “En caso de saludo posterior al partido, los contactos físicos o afectivos (abrazos, muestras efusivas) están medidos. Se prioriza el respeto, la equidad hacia todos los equipos y la sobriedad del gesto”.